¿No?
Semejante al '¿o qué?', destila inseguridad, duda y, en su grado más extremo, sumisión. Se podría decir que solamente es significativa esta muletilla (y puede serlo mucho) si se utiliza en la conversación de una manera exagerada, y más aún si surge especialmente en el hablante cuando se comunica con alguna persona en concreto, a la que hay que temer, respetar o considerar (en orden decreciente). Está sintetizando un temor o una simple sospecha que se podría expresar como "¿No crees tú lo mismo?" "¿No piensas igual?" Parece ser que los seres inferiores (como los niños y las mujeres, hasta hace muy poco) tenían que utilizarla profusamente y con la mayoría de los adultos/hombres si no querían acabar enredados en serios problemas. Aunque dijesen obviedades o verdades como puños.No es muy buena la película, ¿no?